Hoy, vamos a describiros las
características de una mesa de cristal, dónde la podemos colocar, que espacio
ocupa, en que estilo encaja mejor...
Una de sus principales
características es su extrema ligereza visual, al ser de cristal hace que los
espacios donde están situados parezcan menos pesados y con mayor espacio.
Otra característica es que realza las piezas que están apoyadas sobre ella y les proporciona un mayor protagonismo.
Son ideales para estancias
pequeñas, ya que al ser transparentes no ocupan, ni cargan el espacio dejando
ver los objetos a través de ellas. También aportan luminosidad a las zonas más
oscuras de la habitación.
Una propiedad especifica del
cristal es el juego de reflejos que la luz hace al incidir sobre él, esta propiedad
crea por si misma detalles decorativos que no tienen otros materiales, haciendo
a las piezas de cristal elementos imprescindibles en una decoración actual,
acentuando y creando sofisticación en el ambiente.
Estas mesas de cristal la
podemos usar para cualquier estilo decorativo, incluso unen piezas y ambientes de
distintos estilos haciendo conexión en la estancia. El cristal mezclado con
otros materiales como la madera, el acero inoxidable…, podemos convertir
diseños más clásicos en otros más actuales.
En el mercado podemos
encontrar muchos diseños, con distintas formas y tamaños, las colocaremos en
cualquier ambiente de nuestra vivienda, como salones, entradas, comedores, despachos, etc.
Las mesas de cristal suelen
tener una gran variedad de acabados, normalmente las más utilizadas en
decoración son las transparentes, pero podemos encontrarlas esmeriladas,
espejadas, satinadas, coloreadas, etc.
Las mesas de cristal hacen que el espacio sea más elegante y proporcionan más amplitud.
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